Recientemente, el portal cristiano Christianity Today publicó un artículo muy particular acerca de la plantación de iglesias, el cual fue titulado Se buscan: Plantadores de iglesias. Recompensa: $50.00 (Wanted: Church Planters. Reward: $50,000).
El artículo en el que se entrevistó a Matt Chandler, presidente del ministerio Acts 29 durante los últimos 10 años, presenta la propuesta que ha hecho la organización cristiana para impulsar la plantación de iglesias en el mundo. Todos aquellos nuevos plantadores que hagan parte de Acts 29 recibirán apoyos de hasta 50 mil dólares. La red, que cuenta con más de 700 iglesias en 44 países, tiene como objetivo en este 2022 aumentar su apoyo para que el evangelio sea llevado a través de iglesias y plantadores centrados en el evangelio. Actualmente, Acts 29 tiene unos 500 hombres alrededor del mundo en proceso de evaluación y afiliación como plantadores.
Fue así como decidimos aplicar «zoom» al tema de la plantación de nuevas iglesias en Latinoamérica entrevistando a representantes, no solo de Acts 29, sino también de otros ministerios como City to City y Sovereign Grace Church, que han fijado su mirada y esfuerzo en América Latina a fin de que sean establecidas nuevas iglesias con enfoques correctos de la doctrina bíblica y con hombres fieles a su llamado.
Una realidad
En los últimos años, la plantación de iglesias centradas en el evangelio ha vivido un despertar: así lo confirmó Juan Hernández, pastor y director para Latinoamérica de Acts 29, quien, además, cree que la necesidad que se ha manifestado en los últimos años de nuevas congregaciones es un buen síntoma para América Latina. «Esto es algo que va a llevar tiempo, que va a necesitar recursos, y que va a requerir paciencia, pero creo que hay una señal positiva: el hecho de qué cada vez más iglesias entienden la responsabilidad de que el reino de los cielos avance y se extienda a través de la plantación de iglesias bíblicas», manifestó el pastor de Rescue Mission Church en Barranquilla, Colombia.
Por otra parte, el pastor Andrés Garza Ayala, director de City to City en Latinoamérica, expresó que la plantación de iglesias es un fenómeno que se ha producido gracias a que hay muchas organizaciones, como City to City, que quieren apoyar nuevas plantaciones y que así la Iglesia de Cristo avance. Sin embargo, para él, el tipo de plantación orientada a impactar ciudades enteras, tal como lo buscan en el ministerio que dirige, es algo nuevo: «Es bueno que estas iglesias plantadas no son iglesias de cualquier género, sino que son reformadas, con un énfasis en la centralidad del evangelio; esa es una realidad que está creciendo en este momento. Pero, desde la perspectiva de City to City, la visión no solamente va dirigida a la plantación de iglesias centradas en el evangelio, sino también a iglesias que colaboren en cada ciudad donde están, que se ayuden entre ellas y que tengan la visión multiplicadora; una visión de colaboración».
Garza Ayala fue mucho más allá y manifestó que existe un problema grave en América Latina y es que se plantan iglesias, pero cada una de ellas trabaja de manera independiente sin lograr impactar positivamente la ciudad donde están ubicadas: «Desde nuestro ministerio no solo ayudamos a plantadores en la gran comisión, sino que los motivamos y enlazamos con otros plantadores de diferentes denominaciones: todos centrados en el evangelio y con una misma visión teológica, pero trabajando en conjunto», acotó el pastor de la iglesia «San Pedro» ubicada en la ciudad de San Pedro, México.
Una opinión similar compartió el director de Sovereign Grace Church, Mark Prater, acerca del momento actual que vive Latinoamérica en cuanto a la plantación de iglesias. Este ministerio se ha interesado en apoyar plantaciones en países de Centroamérica y Sudamérica: «Creo que este es un momento emocionante para plantar iglesias en América Latina debido a la difusión de la doctrina reformada junto con un compromiso con la predicación expositiva centrada en el evangelio. La gente quiere que se le predique la verdad a través de una sólida predicación exegética y expositiva. Además, la gente anhela una comunidad genuina centrada en Cristo y su Palabra. Por estas razones, creo que es un momento maravilloso para plantar iglesias en América Latina».
Sin duda, el deseo no solo de hombres fieles de plantar iglesias sanas sino también de personas comunes, que buscan que se les predique la Palabra de verdad, es un gran motivante para que desde ministerios (como los que hemos consultado) se busque apoyar el crecimiento del evangelio en muchas más ciudades de nuestros países.
El carácter y el llamado de los plantadores
Plantar iglesias sanas no es un trabajo que se pueda delegar a cualquier persona, y ello está muy claro para las redes consultadas en este artículo. En Sovereing Grace Church, Mark Prater aclaró que aquellos que desean hacer parte de su organización como plantadores es necesario que cumplan con requisitos que son de vital importancia y que son claros en la Escritura: lo primero que ellos buscan son personas con buena formación y discernimiento teológico, que prediquen eficazmente la Palabra de Dios. Otro de los aspectos analizados en un plantador es su fe fuerte en Dios para poder plantar una iglesia, así como una consciencia de que su trabajo depende absolutamente de Dios.
«El plantador debe tener una relación creciente con Cristo porque su pasión por Cristo influirá e impactará en su plantación. Asimismo, es necesario un matrimonio fuerte debido a las presiones y desafíos de la plantación, y, finalmente una voluntad de desgastarse y ser desgastado por su iglesia», resaltó Prater.
Aspectos similares se revisan desde City to City, para quienes es de vital importancia el llamado de Dios. En sus pruebas identifican primero si el llamado de sus aspirantes es para líderes de algún ministerio en la congregación, para pastor o plantador. Según Andrés Garza, existe una gran diferencia entre el pastor y el plantador.
«Las características del libro de Hechos, con el apóstol Pablo y Timoteo, nos habla de aquellas características que son particulares de los plantadores: creatividad, liderazgo y facilidad de relaciones, así como otras características espirituales. Pero un pastor tiene otras. Aquí evaluamos a través de esas características el carácter, cómo reaccionan a las situaciones difíciles, a la decepción, a las acusaciones, al estrés y la ansiedad, y qué tanto pueden soportar. Todo eso también lo trabajamos en sus esposas, y evaluamos sus matrimonios», fueron las palabras del director de City to City en Latinoamérica.
Juan Hernández reveló cómo es el proceso para hacer parte de Acts 29. El primer paso es realizar un diagnóstico y evaluación al posible candidato. También se examina el aspecto teológico a través de un grupo de pastores que, además, evalúan su carácter; lo que demostrará si realmente tiene condiciones para plantar una iglesia. Todo este proceso ayuda a identificar si los candidatos son aptos para servir en la obra de Dios. «Una de las cosas más bonitas de este proceso es que cuando hemos llegado a informar a algunos candidatos que, según nuestra evaluación, creemos que no son aplicables, se sienten liberados y, en lugar de molestarse, dicen que sabían que no tenían ese llamado pero mucha gente les decía que sí», expresó Hernández.
Con este tipo de procesos previos, en Acts 29 creen que están previniendo desastres en iglesias, que de otro modo tendrían que cerrar debido a que sus líderes no califican para tal labor.
Plantadores que se apoyan
Las organizaciones consultadas otorgan diferentes apoyos a quienes hacen parte de sus ministerios, pero todas concuerdan en algo: los plantadores necesitan caminar acompañados. Acts 29 fomenta el compañerismo entre sus integrantes con plantadores de otras iglesias, con los que pueden tratar asuntos cotidianos del ministerio, así como rendir cuentas y crecer juntos. Existen muchas iglesias con mayor madurez y mayor capacidad financiera que están dispuestas y deseosas a apoyar congregaciones que están iniciando y que, a través de Acts 29, logran relacionarse.
Por su parte, Sovereign Grace Church tiene, además de los apoyos en cuanto a la preparación y ordenación de plantadores, una filosofía de acompañamiento y relación con sus plantadores en la que puedan conocer de cerca muchos aspectos importantes del ministerio. También proveen, en algunos casos, de equipos de personas que ayuden al plantador a plantar nuevas iglesias.
En el caso de City to City, buscan que sus integrantes desarrollen una mentalidad no solo de plantar nuevas iglesias, sino también de pastorear la ciudad donde se sirve. Por eso fomentan que logren entender que su iglesia no es el centro de las cosas, sino un instrumento de Dios para que la ciudad sea transformada. En su proceso con plantadores, los entrenan por dos años para que puedan tener esta mentalidad y no solo plantar iglesias, sino también multiplicarse.
Otra de las similitudes de los procesos para plantadores en estas tres organizaciones, es que las esposas son un aspecto importante en la búsqueda del aval, por lo cual muchas de las evaluaciones e instrucciones van dirigidas a ellas como compañeras permanentes de quienes sirven plantando iglesias.
¿La pandemia fortaleció o debilitó la plantación?
Andrés Garza Ayala dice que en medio de la pandemia el 20% de sus iglesias inscritas se debilitaron; esto a causa de que no hubo en este tiempo de crisis la suficiente cantidad de personas para trabajar con los plantadores y caminar con ellos en esos momentos difíciles. «Sin embargo, un 80% de sus iglesias lograron fortalecerse gracias a que pudieron enfocarse más en ellos; esto produjo que la mayoría de sus iglesias se multiplicaran tanto en asistencia como en ingresos económicos. Al fin de cuentas, en 2020 todas las iglesias de alguna manera se debilitaron, pero en 2021 la gran mayoría se fortalecieron», puntualizó el director de City to City.
Una de las cosas que más ha impactado a Garza en Latinoamérica ha sido la gran necesidad de la centralidad en el evangelio: el cómo predicar y plantar iglesias donde el centro sea el evangelio. «No creí que hubiese tanta necesidad, porque hay muchas iglesias reformadas en América Latina, pero la verdad es que ser reformado y ser centrado en el evangelio son dos cosas muy diferentes. Ese deseo de ser centrado en el evangelio, de poner a Cristo como el centro de la vida, eso es lo que más me ha sorprendido».
Mark Prater, con respecto a la plantación en medio de la pandemia, afirmó: «Se podría anticipar que la pandemia debilitaría la plantación, pero en realidad la pandemia la ha fortalecido. Durante ella, la gente tenía preguntas, luchaba con su mortalidad y anhelaba una comunidad genuina. Por lo tanto, muchas personas se dirigieron a las iglesias para responder a sus preguntas y encontrar esperanza».
Finalmente, el pastor Juan Hernández dirigió dos recomendaciones a todos aquellos plantadores en ejercicio o que sienten el llamado a servir en ese ministerio: «Dejen a un lado la idea que tenemos de que si Dios me llamó entonces él se va encargar. Mejor busquen una iglesia local desde la que puedan ser enviados; ese es el modelo bíblico y, por mucho talento que creas tener, y por mucho deseo que tengas de plantar una iglesia, si lo haces separados del modelo de Señor, es difícil que las cosas avancen y prosperen a la manera del Señor. Además, busquen compañerismo, no se aíslen, ya que el trabajo pastoral es difícil, pero de la mano de otros pastores y de otros consiervos se hace más llevadera la carga».