Un monje cristiano que se destacó por su espiritualidad ascética y su erudición de la Biblia.
Un Padre de la Iglesia que se destacó por su lucha contra el arrianismo y la defensa del Concilio de Nicea.
William Cameron Townsend empezó vendiendo Biblias entre los indígenas para, al final de su vida, convertirse en el principal catalizador del mayor movimiento de traducción bíblica de la historia.
Philipp Jakob Spener, el teólogo luterano alemán que inició lo que se conocería como el movimiento pietista.
David Martyn Lloyd-Jones fue un ministro y médico muy influyente en el ala reformada del movimiento evangélico del siglo XX. También fue una figura clave en el avance del movimiento de predicación expositiva.
John Eliot fue un misionero inglés entre los indígenas nativos de Norteamérica que fundó iglesias, escuelas y tradujo la primera Biblia a un idioma nativo americano.
Uemura Masahisa fue un pastor, teólogo, pionero del protestantismo en Japón y crítico del Meiji.
Robert Murray M’Cheyne fue un ministro presbiteriano escocés en la ciudad de Dundee, cuyo corto ministerio tuvo un profundo impacto en su nación.
Un curioso librero español que transportó clandestinamente literatura evangélica para sus compatriotas.
Juan Bautista Canut de Bon Gil fue un pastor de origen español que predicó el evangelio y fundó iglesias en Chile durante el siglo XIX. Debido a su gran influencia se empezó a denominar a los evangélicos chilenos como “canutos”.
Gordon Fee fue un erudito pentecostal reconocido por promover una lectura disciplinada de la Escritura, así como por señalar a la Biblia como un lugar de transformación para la vida de los creyentes.
Amy Beatrice Carmichael sirvió en la India como misionera durante 55 años, abriendo orfanatos y predicando el evangelio, especialmente a las mujeres y a los niños.