La Copa Mundial del 2022 en Catar ha sido llamado por diferentes medios “el mundial más polémico de la historia”. Hoy la sociedad catarí está a la vista de los medios de información y los fans de todas partes del mundo a causa de diferentes situaciones polémicas que han rodeado el certamen. Desde el proceso mismo de elección del país como sede del torneo, pasando por el clima, el cambio de fecha y las condiciones de los trabajadores migrantes, y llegando hasta la suspensión de Rusia y diferentes abusos a los derechos humanos, la competencia ha experimentado muchas controversias que tienen el ojo del mundo sobre Catar.
Ahora, la iglesia de Cristo en todo el mundo es parte de esa gran audiencia internacional que está siguiendo el Mundial segundo a segundo. Sea que la selección de su país esté jugando en el torneo o no, millones de cristianos hoy escuchan las noticias, tanto deportivas como políticas, sobre Catar. ¿Cuál es la reacción de los cristianos ante lo que escuchan? En este artículo hablaremos sobre cuatro asuntos en Catar que deberían de preocupar a los creyentes en todo el mundo y por los cuales deberían hacerse muchas oraciones. Si bien no son los únicos, sí son de vital importancia.
1. El jornalero y el extranjero son oprimidos
El hecho de que la Copa Mundial se realice en Catar implica que la Fifa y el país recibirán multimillonarias ganancias gracias a la asistencia a los eventos deportivos y a todo el turismo que girará en torno a ellos. En preparación para este evento, Catar ha invertido 220 billones de dólares, 17 veces más de lo que se invirtió en el Mundial de Rusia 2018. Gran parte de esta inversión fue hecha para construir nuevos estadios de fútbol, hoteles de lujo y un sinnúmero de lugares de entretenimiento y consumo para los turistas del mundo que hoy están en Catar.
Pero, a pesar de que la cifra en sí misma es escandalosa, lo más impactante es lo que han sufrido los trabajadores migrantes en Catar que han sido la mano de obra en todo el proyecto de Catar durante la última década. Medios internacionales de comunicación como The Guardian han reportado que, desde diciembre de 2010, momento en el cual la Fifa anunció que Catar sería el lugar del Mundial del 2022, hasta la actualidad, más de 6 500 trabajadores provenientes de India, Pakistán, Nepal, Bangladesh y Sri Lanka han muerto en la construcción de alguna obra. Esto significa que desde el 2010, cada semana han muerto en promedio 12 personas por causa de las construcciones. Vale resaltar que estos datos fueron provistos por los países anteriormente mencionados, y no incluyen cifras de países que envían muchos trabajadores a Catar, incluyendo Filipinas y Kenia.
A pesar de que Catar niega estos sucesos diciendo que la mayoría de esas muertes fueron por causas naturales, es innegable que se ha actuado con injusticia. A pesar de que Catar es un país rico, las condiciones de trabajo de los migrantes eran infrahumanas. Según las fuentes de las cifras ya mencionadas, muchos trabajadores tenían que hacer su labor bajo temperaturas muy elevadas.
¿Cuál debería ser la reacción del cristiano? La Biblia es clara en cuanto a la opresión en contra del jornalero y el extranjero. Malaquías 3:5 dice “seré un testigo veloz contra los […] que oprimen al jornalero en su salario, a la viuda y al huérfano, contra los que niegan el derecho del extranjero y los que no me temen”. El cristiano debería dolerse por esta situación, orar por justicia en la venida de Cristo y por la obra del evangelio transformando la sociedad catarí.
2. El evangelio puede ser predicado
Una de las mayores preocupaciones a nivel internacional es que Catar es un país musulmán muy conservador, que a causa de sus creencias islamistas posee leyes bastante restrictivas. Por ejemplo, el consumo de alcohol está prohibido dentro de los estadios y las zonas cercanas, y sólo en hoteles internacionales y zonas muy particulares será habilitada su venta, por un valor muy elevado y de manera muy limitada. También habrá restricciones sobre las vestimentas, las manifestaciones públicas de afecto, la grabación de vídeos en lugares públicos, las celebraciones, entre otras restricciones bastante controversiales para los fans de occidente.
Una de las restricciones más notables es la limitación que el país impone sobre el uso de símbolos religiosos o la práctica de religiones diferentes al islam. En Catar hay zonas destinadas para que los extranjeros practiquen sus religiones, pero para los locales está prohibida la práctica de alguna religión distinta al islam. Si bien durante el Mundial el país será más flexible con respecto a la expresión de la religión de sus visitantes extranjeros, Catar sigue siendo un lugar en donde el cristianismo no es bienvenido para los locales.
En medio de este contexto, hay muchos jugadores y fans cristianos que están en Catar y tienen la posibilidad de dar testimonio de su fe en Cristo. En medio de una población mayoritariamente musulmana (casi del 80%), los creyentes tienen una oportunidad única para predicar el evangelio y ser luz en medio de la oscuridad, por lo que la iglesia de Cristo en todo el mundo debe orar para que esto ocurra. Esto es parte del mandato que el Señor Jesús dio en el Sermón del Monte: “Así brille la luz de ustedes delante de los hombres, para que vean sus buenas acciones y glorifiquen a su Padre que está en los cielos” (Mateo 5:16).
Un claro ejemplo de esto fue lo ocurrido el pasado domingo 20 de noviembre de 2022, cuando Ecuador venció a Qatar 2-0. Este evento no solo fue notable por el hecho de que por primera vez en 92 años el país local pierde en el partido inaugural, sino porque un grupo de jugadores ecuatorianos cristianos se arrodilló en la cancha a agradecer y a confesar su fe. Si bien la muestra de gratitud durante los partidos es muy común entre los equipos latinoamericanos, este tipo de acciones pequeñas son medios que Dios puede utilizar para manifestar su reino entre los incrédulos.
3. La iglesia de Cristo está siendo perseguida
A lo largo del tiempo, la Copa Mundial ha sido la oportunidad para que los medios de comunicación a nivel internacional analicen las controversias del país en donde se realiza el torneo, y el Mundial de Catar 2022 no es la excepción. Cindy Colmenares, periodista y cronista de la emisora RTL, dijo lo siguiente en una entrevista realizada por France 24: “[La Copa] es una oportunidad perfecta para poner el foco sobre estos temas de los cuales no se habla si no hay un Mundial, y esto es lo lamentable”. Tristemente, poco se conoce en Occidente sobre la situación de la Iglesia Cristiana en Catar y, como ha afirmado Colmenares, es necesario un Mundial para que todos dirijamos nuestra mirada hacia allá.
Como ya lo dijimos, durante el torneo, el gobierno catarí será más tolerante con las expresiones religiosas de los visitantes extranjeros. Pero, ¿qué va a suceder una vez que se acabe? ¿Qué ha venido sucediendo desde antes de que la Fifa decidiera que el Mundial se realizaría en Catar? Vale la pena resaltar dos aspectos preocupantes de la situación de la Iglesia en Catar reportados por el ministerio de Puertas Abiertas.
Primero, de acuerdo con el reporte anual del ministerio de Puertas Abiertas, Catar ocupa el puesto número 18 en la lista de países en donde los cristianos son más perseguidos en el mundo, subiendo 11 puestos con respecto al año anterior. La razón de este aumento en la lista es que los cristianos recientemente han experimentado más violencia que en años anteriores, y que, por causa del COVID-19, las autoridades locales fueron muy restrictivas y mantuvieron las iglesias locales cerradas por mucho tiempo para evitar la propagación del virus.
Segundo, aunque Catar tiende a ser tolerante hacia la religión de los extranjeros, no es tolerante con sus propios locales convertidos. Aquellos musulmanes que se convierten al cristianismo sufren bastante persecución por parte de la sociedad y de sus familias, quienes los excluyen en términos sociales y los privan de diversos privilegios. Las que más sufren son las mujeres, quienes por razones culturales pueden ser mantenidas en arresto domiciliario por mano de sus propias familias y se les niega el acceso a libros, internet y medios de comunicación.
Estas situaciones, lastimosamente, van a continuar aún después de terminado el Mundial. Los cristianos no debemos fijarnos en Catar y otros países de Medio Oriente solo durante el lapso del torneo. Es fundamental que esta región musulmana del mundo esté en las oraciones de la Iglesia de Cristo, pidiendo por la predicación del evangelio y un cambio profundo en esta sociedad con respecto a los cristianos.
4. LGTB, la nueva bandera de Occidente
Como ya lo mencionamos, la sociedad catarí es bastante restrictiva con la conducta moral de las personas, y el castigo que se impone sobre quienes rompen las leyes ha sido un tema de discusión en todo el mundo. Si bien el cristianismo en general está de acuerdo con el hecho de que ver pornografía, ser homosexual y tener relaciones sexuales fuera del matrimonio son conductas inmorales, en países occidentales la ley no las condena. Sin embargo, en una sociedad musulmana como la de Catar, estas conductas son condenadas por la ley y conllevan un castigo.
Los medios internacionales reconocen que, aunque Catar ha tenido un gran progreso en los últimos años y es cada vez más tolerante, muchas de sus políticas aún deben cambiar, y la tolerancia a la comunidad LGTB es la principal crítica al país musulmán.
Como parte de una gran iniciativa internacional que pretende lograr un cambio en Catar, el equipo nacional de Estados Unidos tomó un paso bastante controversial: transformó su logo clásico, quitando las líneas rojas y poniendo la bandera LGTB en su lugar. Aunque este logo no se utilizará durante los partidos oficiales, sí se utilizará en otros contextos en donde Estados Unidos lo tenga permitido.
Al respecto de este cambio en el logo, el entrenador del equipo, Gregg Berhalter, dijo lo siguiente: “No solo en Estados Unidos queremos llamar la atención sobre asuntos sociales, sino también en todas partes. Reconocemos que Catar ha dado grandes pasos y que ha habido mucho progreso, pero todavía hay algo de trabajo que hacer.”
Este asunto debe llevar a la Iglesia en todas partes a orar, pidiendo que la inmoralidad no sea lo que más identifique a los países occidentales. Si bien es bueno que la comunidad internacional se preocupe por las medidas opresivas en Catar y otros países musulmanes, no es bueno que las personas en los países tradicionalmente cristianos muestren una mayor preocupación por la aceptación de las prácticas LGTB que por los cristianos perseguidos. El problema no es oponerse a las creencias de Catar; el problema es hacerlo con una bandera LGTB en lugar de una cruz.
Conclusión: a tiempo y fuera de tiempo
Una de las últimas exhortaciones que el apóstol Pablo le dejó a Timoteo la encontramos en 2 Timoteo 4:1-2:
En la presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de juzgar a los vivos y a los muertos, por Su manifestación y por Su reino te encargo solemnemente: Predica la palabra. Insiste a tiempo y fuera de tiempo. Amonesta, reprende, exhorta con mucha paciencia e instrucción.
Al igual que Timoteo, la iglesia de Cristo está llamada a orar y dar testimonio en todo momento, “a tiempo y fuera de tiempo”, aprovechando cada oportunidad y estando presente en cada situación de la historia. Así, el Mundial de Catar es una oportunidad que la Iglesia de Cristo no debe dejar pasar para orar y para dar testimonio del evangelio.