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En 1871, Charles Spurgeon (1834-1892) le escribe a su esposa, a quien llamaba Susie:
Mi profundamente amada. Nadie sabe cuán agradecido estoy a Dios por ti. Y de todo lo que he hecho por Él, tu parte es grande. Porque al hacerme tan feliz, tú me has dotado para el servicio. Ni un gramo de poder se ha perdido para la buena causa por culpa tuya. Al contrario, he servido al Señor aún más por tu dulce compañía. ¡El Señor Dios todopoderoso te bendiga ahora y por siempre!
Bienvenidos a este resumen de la vida de Susannah Spurgeon.
El predicador campesino
Susannah Thompson nació el 15 de enero de 1832 al sur de la Ciudad de Londres. Fue criada en un hogar piadoso y en un ambiente cristiano. Era hija de un próspero fabricante de cintas. Era agraciada, bonita y se vestía con estilo, con los vestidos de moda y los populares gorros de la época victoriana.
En 1852, Susannah vio por primera vez al hombre que se convertiría en su esposo. Se trataba de un joven de tan solo 19 años llamado Charles Spurgeon que había sido invitado a predicar en la famosa Capilla de Park Street en Londres. Susannah no pretendía asistir al servicio, pero ante la insistencia de sus amigos finalmente acudió.
A Susannah no le impresionó mucho ni la predicación ni la apariencia de Charles. Criticó su atuendo, su estilo de predicación y su acento campesino. El joven predicador no era de Londres. Venía de un pueblo a unas 60 millas de la gran ciudad.
Una relación fuera de lo común
Los dos jóvenes se conocieron y entablaron una amistad, pero no fue amor a primera vista. Susannah pensaba que el joven predicador estaba un poco ansioso sobre sus intenciones con ella. Spurgeon era un pretendiente persistente. La amistad de ambos ayudó a fortalecer la vida espiritual de Susannah. Charles le regaló una copia de El progreso del peregrino para ayudarle en su avance espiritual, además de orar por ella y apoyarla en el crecimiento de su fe.
En 1854 se hicieron novios, pero tendrían que esperar un par de años más para el matrimonio. El noviazgo fue una relación fuera de lo común. Charles tenía poco tiempo libre para dedicarle a Susannah. Una de sus citas más comunes consistía en que Susannah lo acompañaba mientras Charles editaba su sermón semanal.
Se casaron el 8 de enero de 1856. Se fueron a París para su luna de miel y en el transcurso de un año fueron padres de hijos gemelos, Charles y Thomas. Susannah nunca pudo tener más hijos, debido a su mal estado de salud después del parto, pero fue una fiel entrenadora de sus dos pequeños en la doctrina cristiana y tuvo la alegría de ver a los dos como cristianos a una edad temprana. Cuando se convirtieron en hombres adultos, sus hijos reconocieron públicamente la influencia de su madre y su ejemplo, que había sido fundamental para su conversión.
El compromiso del matrimonio
Como uno de los hombres más influyentes de Inglaterra, Charles llevaba el peso de la responsabilidad ministerial sobre sus hombros. Su labor requería horas, energía y mucho trabajo semanal.
Al principio de su matrimonio, a Susannah le resultó difícil entender la naturaleza de su papel como la esposa del gran predicador. En medio de una crisis ella buscó guía en su paciente madre, quien le dio algunos consejos útiles. Le dijo que Charles no era un hombre común y que toda su vida debía estar dedicada al servicio del Señor, por lo que Susannah "nunca debería interponerse tratando de ponerse a ella primero en el corazón de su esposo". Susannah decidió entonces alinear sus deseos con los de su esposo y poner la obra del Señor primero en su propio corazón.
El Fondo del Libro
Durante ese tiempo a muchos ministros que vivían en Inglaterra se les daba un salario tan bajo que apenas podían alimentar a sus familias, y mucho menos podían comprar libros para ayudarles a crecer espiritualmente y mejorar sus ministerios. Posteriormente se descubrió que muchos ministros no habían podido comprar un libro nuevo durante diez años, debido a sus limitaciones económicas.
Charles Spurgeon fue un escritor prolífico y publicó la mayoría de sus sermones. En 1875 completó el primer volumen de Discursos a mis estudiantes y le entregó a su esposa un borrador, pidiendo su opinión. Al terminar de leerlo, Susannah dijo a su esposo que deseaba poder poner ese libro en las manos de todos los ministros de Inglaterra, a lo que él respondió "Entonces, ¿por qué no hacerlo?"
Susannah sintió el reto de hacerlo posible, pero no contaban con los recursos suficientes. En ese momento recordó que tenía algo de dinero que había guardado cada vez que tenía algo extra. Fue a su habitación y buscó el dinero y, cuando lo contó, se dio cuenta de que tenía dinero suficiente para pagar cien copias del libro. Fue en ese instante que nació el “Fondo del Libro”.
"Quizás el Señor use esta pequeña ofrenda para llevar algunos libros a los pastores", pensó. Sin embargo, nunca soñó que esta experiencia la llevaría a invertir el resto de sus días en el servicio a los pastores y a sus familias.
Un proyecto sin recursos
El siguiente número de Sword and Trowel, revista que publicaba Charles, se imprimió con el anuncio del proyecto de la Sra. Spurgeon de entregar los libros e invitaba a los ministros pobres a solicitarlo.
Las solicitudes resultaron ser más numerosas de lo que ella anticipó y en esa primera entrega ella misma suministró doscientas copias en lugar de las cien que originalmente había presupuestado. En el siguiente número de su publicación, Charles habló de los muchos ministros que deseaban nuevos libros para aumentar su conocimiento, mejorar sus ministerios y acerca del fondo de libros que Susannah había creado para satisfacer esta necesidad. Poco tiempo después, comenzó a llegar dinero para financiar el Fondo de libros, de modo que se pudieran proporcionar recursos a más ministros necesitados.
La acción de Susannah puso en marcha una organización benéfica que continuó hasta su muerte. El Fondo del Libro llegó a distribuir 71,000 copias de libros por año a ministros de todo el país.
Dolencia física pero no del corazón
Además de apoyar a Charles en sus temporadas de depresión y enfermedad, Susannah sufrió graves problemas de salud. En 1865, cuando tenía 33 años, empezó a tener dificultades para caminar. A partir de ese momento rara vez escuchó a su esposo predicar durante los siguientes 27 años hasta su muerte, ya que no podía desplazarse hasta la iglesia. Pero la pareja generalmente pasaba las tardes de los sábados reunidos. Juntos leían comentarios y discutían las Escrituras para el sermón de Charles del día siguiente.
La condición de Susannah se volvió lo suficientemente grave como para requerir cirugía. James Simpson (1811-1870), padre de la ginecología moderna, intentó una operación cervical en Susannah en 1869, pero fue en vano. El resultado de la cirugía fallida fue devastador. "Sufrir en lugar de servir se convirtió en mi rutina diaria", dijo un día. Pero Susannah creía que Dios estaba usando sus dolencias físicas para refinar su carácter. Incluso en las circunstancias más insoportables, Susannah demostró gratitud, alegría y paciencia. Llena de gratitud, confió en que Dios le daría fortaleza a través de su debilidad.
Al lado de Charles Spurgeon
Charles y Susannah estuvieron casados por 36 años. El matrimonio fue una fuente de fortaleza y consuelo permanente tanto para Charles como para Susannah. Ambos sufrieron enfermedades y discapacidades periódicas, pero durante toda su vida se amaron profundamente y se entregaron el uno al otro, cada uno buscando el medio o las palabras para aligerarse la carga mutuamente.
Susannah Spurgeon murió en 1903, 11 años después de la muerte de su esposo. A pesar de sus problemas de salud y de sus impedimentos físicos que la limitaron durante toda su vida, fue una mujer consagrada a su labor de esposa y madre, pero sobre todo fue una mujer piadosa que sirvió al Señor usando todos los medios que tuvo a su alcance.
¿Y tú? ¿Qué piensas? ¿De qué forma crees que el matrimonio de los Spurgeon es un ejemplo para los matrimonios cristianos de hoy? ¿De qué forma crees que tus limitaciones se pueden convertir en una excusa para no obedecer tu llamado?
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