Después de un poco más de cinco siglos de la publicación de Las 95 “Tesis”, vale la pena releerlas y recordar las razones por las que Martín Lutero protestó.
La iglesia es sustantivo, no verbo: el gran problema de desechar a la iglesia local como punto de reunión, adoración y discipulado en comunidad.
Hemos sido invitados a una mesa. Partimos el pan y tomamos el vino porque no estamos hechos sólo de ideas y símbolos. Se nos entregó y hemos sido llamados a vivir un evangelio con todo nuestro ser y sentidos.